miércoles, 28 de noviembre de 2007

Noticias sobre el saneamiento del Riachuelo!!

El saneamiento del Riachuelo: el plan oficial que se presentará ante la Corte Suprema

Todos los efluentes, al Río de la Plata

El Gobierno proyecta que en una década se vuelquen en el estuario todos los desechos; los especialistas plantean sus dudas

Miércoles 28 de noviembre de 2007 | Publicado en la Edición impresa

En diez años, los desechos del Riachuelo se volcarán en el Río de la Plata. Ese es el objetivo ambiental que persigue el plan de saneamiento del río más contaminado de la Argentina que el Gobierno presentó ante la Corte Suprema de Justicia.
El programa de saneamiento, reformulado por la Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo (Acumar) después de las críticas de los expertos de la UBA, retoma la propuesta realizada por Aguas Argentinas en la década del noventa de recolectar los efluentes cloacales y los residuos industriales previamente tratados y volcarlos al Río de la Plata. Aunque los especialistas acuerdan en el objetivo, observan que para poder aplicarse correctamente es necesaria una política integral, hoy ausente, según su visión.
"El caudal y la oxigenación del Río de la Plata lo permiten. Pero esto es un sistema que funcionará a largo plazo: hay que trabajar mucho para lograrlo", explicó ayer Mario Ferdkin, técnico de la Secretaría de Ambiente, a LA NACION, durante un recorrido en helicóptero por la cuenca.
Este plan requiere que el 45 por ciento de la población de la cuenca que hoy no tiene cloacas cuente con ellas, así como que tenga acceso al agua potable. Además, requiere de la eliminación de los basurales a cielo abierto. Y una cuestión fundamental: que las industrias se reconviertan a la producción limpia para que los efluentes no generen una contaminación que el río no pueda soportar.
"Esto sólo se podrá hacer con un trabajo, continuado en el tiempo, de concientización. Es muy importante, que en materia de residuos sólidos se tome conciencia. La Acumar está haciendo una caracterización de los innumerables basurales a cielo abierto, para trabajar en su eliminación y en la remediación de los terrenos", agregó el funcionario.
Vale recordar que LA NACION mostró hace dos semanas la ocupación, sobre basurales, de terrenos anexos a la villa 21-24, en Barracas, que comenzó después del anuncio de la limpieza de las márgenes del Riachuelo.
Hasta el momento, el Gobierno sólo avanzó en algunas obras de saneamiento: se licitó la obra de la planta de tratamiento de Berazategui (por donde se vuelcan 35.000 litros de desechos por segundo); se está construyendo una red cloacal en el Sudoeste, que atenderá las necesidades de 270.000 personas, y se definió el emplazamiento de una nueva planta de tratamiento a la altura del Polo de Dock Sud.

No todo son obras
"No hay otro plan. Este es el viejo plan de Aguas Argentinas. Lo que no hay que hacer es limitar todo el plan a la cuestión de las obras de ingeniería con colectores de cloacas. Aspiramos a que sea un plan integral en serio: que incluya los componentes sociales, y el saneamiento específico del Riachuelo", opinó Andrés Nápoli, especialista en medio ambiente de la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN).
Con la solución propuesta coincidió Carlos Gómez, titular de la cátedra de Ingeniería Ambiental de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN). "Estoy de acuerdo. Creo que es una solución una vez que se definan los usos de cada curso de agua. Eso sí, los líquidos deben estar tratados, según se determine", dijo.
En ese sentido, el técnico recordó que el uso definido en el plan de saneamiento de la década del noventa, el Riachuelo iba a ser utilizado para recreación sin contacto directo. En cambio, para el Río de la Plata, la categorización era la de recreación con contacto directo y preservación de la fuente de abastecimiento. Cabe recordar que hoy la boca de toma de agua de Aysa está a poca distancia del colector cloacal de Berazategui, razón por la cual la Corte Suprema había intimado a Aguas Argentinas a construir una planta de tratamiento.
Ahora, la planta y la prolongación de otros tres kilómetros aguas adentro del río del colector serán financiadas por un crédito del Banco Mundial de 900 millones de dólares.
Para completar este complejo sistema el plan incluye un monitoreo permanente de las aguas receptoras, de los vertidos de las industrias, así como de las aguas subterráneas.
"El monitoreo se hará, además, con forma de modelo para poder manejar los distintos escenarios, según el tipo de vertido que se haga, la variación de las precipitaciones y el aumento de la población, entre las posibles variables", explicó Ferdkin.

Por Laura Rocha
De la Redacción de LA NACION